El ácido hialurónico ha irrumpido con fuerza en la medicina estética. Y, sin duda, ha venido para quedarse, ya que su aplicación es sencilla y sus beneficios son múltiples. Se habla mucho del ácido hialurónico pero, en la misma medida, se desconoce que es un sustancia que está presente en nuestro propio organismo, principalmente en la piel, el tejido conectivo y los huesos. Precisamente sus aplicaciones en cirugía ortopédica y traumatología son diversas, como la sustitución del líquido sinovial que se pierde durante la realización de artroscopias. De hecho comenzó utilizarse en la medicina deportiva de élite, con resultados regenerativos espectaculares en lesiones articulares.
Para explicar esta tremenda capacidad de regeneración, debemos saber que el ácido hialurónico es básicamente un azúcar que se produce a través de unas encimas situadas en el interior de la membrana celular. Además posee una gran capacidad de hidratación. Un solo gramo de este activo puede llegar a contener hasta seis litros de agua. De manera que tiene un tremendo potencial para hidratar, cuidar y rejuvenecer la piel.
¿Cuáles son sus principales beneficios en cosmética y medicina estética?
- Piel hidratada, luminosa y firme. Con el paso de los años la piel se deshidrata y ofrece un aspecto menos luminoso, más opaco. Según un estudio publicado en Dermato-Endocrinology, el 50% del ácido hialurónico de nuestro organismo se encuentra en la piel. En ella se une al agua con el objetivo de retener la humedad. Por lo que se convierte en un excelente aliado para mantener la piel sana, hidratada y flexible.
- Capacidad rejuvenecedora. Las inyecciones intradérmicas, geles o lociones basadas en este activo, se han demostrado eficaces en la nutricosmética, ya que hidratan, producen elastina y colágeno, y ayudan a restaurar el volumen. En la actualidad este tratamiento se esté utilizando para eliminar algunos signos de la edad, como los surcos nasogenianos (de la nariz a la comisura de los labios); la línea de contorno de labios; arrugas del entrecejo; las conocidas como “patas de gallo”; o las marcas en la frente.
- Volumen en los labios. En la actualidad existen numerosos estudios clínicos con resultados muy concluyentes sobre la eficiencia, tolerancia y elasticidad en el labio superior.
- Mejora de la salud capilar. El ácido hialurónico también se ha demostrado sobradamente eficaz para revitalizar cabellos castigadas por la falta de cuidado e hidratación. Los productos con esta sustancia lo fortalecen. Y también mejoran su densidad.
Muchos de los productos cosméticos contienen ácido hialurónico obtenido por síntesis. Su función es la de penetrar en la piel, mezclarse con el ácido hialurónico natural y, de este modo, promover la producción de más cantidad de esta sustancia, además de favorecer la formación de colágeno.
Además, esta sustancia puede aplicarse a partir de los 30 años. Y como es un activo que se encuentra en nuestro organismo no genera efectos secundarios. ¿Qué aporta el ácido hialurónico según la edad?
- A los 30 años. Es en esta década cuando comienza a notarse la marca de algunas líneas de expresión. Y cuando aparecen las primeras arrugas. A partir de este momento es muy aconsejable la aplicación de ácido hialurónico como tratamiento preventivo. Para paliar esas arrugas incipientes . También para los primeros signos de la edad, como cierta pérdida de luminosidad y elasticidad.
- Entre los 40-50. En la cuarentena comienzan los problemas de flacidez y pérdida de contornos faciales y volumen. Este activo ayuda a paliarlos.
- De los 50 en adelante. Con la llegada de los 50, la piel pierde mucha elasticidad y las arrugas se profundizan. Con los tratamientos de ácido hialurónico se eliminarán las arrugas y devolverán a tu piel hidratación, elasticidad y luminosidad que quieres